Hola a todos;

adjunto un post que me envió Cristina sobre el pasado viernes. Perdonar la tardanza en manteneros informados.

Fran

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Para finalizar esta semana en Palermo, hoy hemos conocido el colegio marianista Fe y Alegría, que es el colegio más grande de la zona en el que actualmente hay 800 alumnos pero no hace mucho tiempo llegó a haber 2000. Es un espacio que realmente choca en este entorno, muy grande, con canchas para hacer deporte y con muchas zonas verdes. Pero es un centro al que le queda muy poco tiempo de vida. Por una cuestión más ideológica y política, que de principios y prioridades, el colegio tiene los días contados, al igual que el resto de los concertados de Bogotá.

Incongruencias de la vida, en un país en el que los alumnos estudian hacinados, con dos turnos de mañana y tarde, terminando el de la mañana a las 11:30 h, siendo esta la mejor forma de crear malos hábitos, ya que tienen demasiado tiempo libre que, por supuesto, pasan en la calle. Aún así, cierran un lugar en el que cabrían un volumen de alumnos suficiente como para satisfacer las necesidades de la zona. Así es este país.

A mediodía he congregado al personal docente, de cocina y de limpieza de dos jardines de infancia para explicarles las intenciones del proyecto, pedirles su colaboración e impartirles un cursito de primeros auxilios que la verdad han agradecido mucho, porque me he centrado en las patologías más frecuentes con las que ellas se encuentran cada día. Cosas muy básicas, pero muy útiles. Les he repuesto su botiquín y les he enseñado a manejarlo.

Un día yo creo que bastante productivo. Y ahora llega el fin de semana para desconectar, hacer turismo y coger fuerzas para un nuevo reto en Ciudad Bolivar

Besos

Cristina